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ACTITUD POSITIVA

Ante las contrariedades y los problemas. Esto nos ayudará por un lado a resolverlo, buscado mejores soluciones, porque el estrés y la negatividad nos bloquea y por otro nos ayudará a ser más felices. Esta actitud positiva será beneficiosa no solo para nosotros, sino también para quien tenemos alrededor, fundamentalmente compañeros, pero también, clientes y candidatos.

PROACTIVIDAD

Adelantarse a los posibles problemas con clientes o candidatos, enfrentarse a las situaciones complicadas de frente, de forma directa y rápida, no dejar que se enquisten, ser decididos y actuar, no esperar. Adelantarnos a posibles necesidades del cliente, llamarlo, preguntarle, no esperar a que él nos diga.

FLEXIBILIDAD – AUTORREGULACIÓN

Flexibilidad horaria en el lugar de trabajo. Ser capaz de Auto-gestionarnos, auto-controlarnos, ser autónomos  y responsables de la organización de nuestro trabajo diario, en cuando y como trabajamos. Tu Consultor – Formador en la empresa no está para controlarte, está para ayudarte cuando tengas dudas, para darte feedback u otra opinión cuando la necesites, pero no supervisará tu trabajo diario, simplemente comprobará, que con el tiempo que se han cumplido los objetivos de tu puesto.

APRENDIZAJE – MEJORA CONTINUA

Aprender con cada cliente, con cada proceso de selección, con cada candidato, de los compañeros, de los libros, de buscar en internet, un error/ fracaso es una oportunidad de aprendizaje, ¡Aprovéchalo!. Este aprendizaje nos tiene que hacer proponer mejoras por parte de todos, en metodología, en soluciones tecnológicas, en detectar competencias, en el trato al cliente, en la relación con candidatos, en el trabajo en equipo. Mejoras para adaptarnos a cambios en el mercado laboral, en la competencia, a cambios tecnológicos etc.

COMUNICACIÓN – TRANSPARENCIA

Atrévete a decir las cosas claras, la sinceridad implica compromiso y seguridad. No tengas miedo en darle Feedback a tus compañeros, ellos lo verán como una forma de aprender y mejorar. Con los clientes ser claros y directos, no generar falsas expectativas, esto nos aporta credibilidad.

ASESORAMIENTO AL CLIENTE

Detectar lo que el cliente necesita, y trasladarle que perfil es el más adecuado. Nuestro servicio no tiene que limitarse a buscar lo que nos piden, tenemos que plantearnos, si es lo que realmente necesitan, y si eso existe en el mercado laboral. Tenemos que implicarnos en conocer la empresa, al gerente, el departamento, el puesto y las funciones. Este asesoramiento, nos ayudará tanto a ganarnos su confianza para que trabaje con nosotros, como a que la selección se complete con éxito y que la persona seleccionada tenga una mayor continuidad en la empresa.

EMPATÍA – CUIDAR A LOS CANDIDATOS

Con las palabras y con los hechos, antes, durante y después del proceso, no podemos olvidar nunca que son personas en un momento muy delicado de sus vidas, donde se están planteando un cambio de trabajo. “No hay buenos o malos candidatos, hay personas que encajan mejor que otras en un puesto, a una estructura, a una tipología de empresa”